Torre de Los Valdés – Castillo de San Cucao

 

   Caleyando por el concejo de Llanera resulta agradable pasear por los caminos próximos a la parroquia de San Cucao, contemplando edificios de apreciable interés. En realidad existe un interesante patrimonio histórico, monumentos que van desde la Edad Media hasta el siglo XX.

   De carácter medieval es la Torre de los Valdés, localizada en el pueblo de Guyame. El conjunto arquitectónico, tal como lo vemos en la actualidad, está formado por una torre cuadrada y un edificio rectangular, que fue añadido a partir de 1880, dando la apariencia y el consiguiente nombre de Castillo de San Cucao.

   La historia nos cuenta que el linaje de los Valdés, uno de los más importantes de la pequeña nobleza en la época medieval asturiana, está presente en Llanera desde antes del siglo XII. Los mismos datos nos confirman que la torre que hoy podemos contemplar fue construida entre los últimos años del siglo XIV y los primeros del siglo XV.

   La torre conserva su estructura cuadrada original, con planta baja y tres pisos. Las diminutas ventanas en forma de arco apuntado que vemos en la tercera planta de todas las fachadas son las únicas originales. Adornadas con escudos nobiliarios, colocados encima de ellas, al este y al oeste.

   También son originales las estrechas aberturas o saeteras, difíciles de apreciar, en las cuatro esquinas de la segunda planta. El remate superior de los muros donde apreciamos las almenas con garitas corresponde a la reconstrucción de 1880. 

   Tanto la torre como el cuerpo rectangular añadido fueron reformados en varias ocasiones, especialmente  durante los siglos XIX y XX, consiguiendo la construcción que podemos observar en la actualidad, un conjunto monumental bastante sobrio, en consonancia con la típica arquitectura rural asturiana. Por su importancia, el edificio está declarado Bien de Interés Cultural de Asturias - Monumento Histórico Artístico.

   Como suele ocurrir en muchos lugares de la geografía asturiana la unión o mezcla entre edificios históricos y naturaleza generan un añadido especial y atractivo, muy valorado por caminantes, visitantes y estudiosos del arte rural. Sin duda, la Torre de los Valdés se encuentra ubicada en un lugar estratégico y privilegiado, cercana al río Nora, una hermosa atalaya desde donde se divisa una parte del valle con el monte Naranco al fondo.

   La historia nos narra que Diego Menéndez Valdés, el Mayor, fue el personaje más destacado de la familia de los Valdés, “responsable de la construcción en 1393 de esta Torre, en el lugar denominado El Pico”, protagonista, además, de viejas historias por las que fue apodado como ‘El Valiente`. 

   En la actualidad, este histórico paraje se ha convertido en un conocido restaurante dedicado exclusivamente a la organización de eventos concertados, es decir bodas, congresos, comuniones, comidas de empresa, …….. Y en las praderías circundantes un club hípico y yeguada, con abundantes caballos y actividades diversas.